Los datos del paro correspondientes al pasado mes de abril, pese a continuar la tendencia positiva iniciada en febrero, no esconden la pérdida de dinamismo del mercado laboral. Así, a nivel intermensual el desempleo ha disminuido en 3.395 personas en relación al mes de marzo, un 3,01%, mientras en el conjunto de España la caída fue del 2,22%, situando la cifra de total en la Comunidad en 109.370 desempleados, 6.144 menos que hace un año, con un descenso interanual del 5,32%, un punto más que a nivel nacional.
Como factor positivo, se sigue constatando el esfuerzo realizado por las empresas y su compromiso con el mercado laboral, pues se registra un aumento de la contratación del 9,54%, con un aumento de 4.545 más en comparación con el mes previo. De ellos, 18.100 fueron contratos indefinidos, cifra un 3,7% superior a la de abril del año anterior.
En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, la misma aumentó en 5.597 afiliados, un 0,58% respecto al pasado mes, situándose en 965.186 personas. Castilla y León se coloca así en la séptima comunidad autónoma con menor aumento porcentual.
En opinión de CEOE Castilla y León, las cifras publicadas por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, aun siendo positivas, deben analizarse con prudencia, pues existen factores que pueden estar empezando a tener un impacto negativo, como la incertidumbre política y regulatoria, y el aumento de los costes empresariales, que siguen siendo la principal preocupación para las empresas.
Una inseguridad que está siendo un freno para las inversiones y está afectando de manera significativa, sobre todo, a las pequeñas empresas.
Por todo ello, la Confederación insiste en la necesidad de priorizar la protección de las empresas para que puedan desplegar todo su potencial de creación de empleo, evitando mayores costes, cargas y gravámenes que lastren la competitividad del sector productivo y, con ello, el empleo.
Por último, CEOE Castilla y León insiste en la conveniencia de emprender reformas, sobre la base del diálogo y la concertación social, que impulsen la actividad económica y hagan posible incrementar la competitividad de las empresas.