Los datos del empleo en la Comunidad correspondientes al pasado mes de agosto denotan una desaceleración en la creación de empleo en la que pueden estar incidiendo factores como el aumento de los costes empresariales y la incertidumbre regulatoria a nivel nacional, en un mes en el que tradicionalmente aumenta el empleo, al coincidir con la temporada estival y el efecto tractor de las actividades vinculadas al turismo.
Así, al igual que ocurría el pasado mes de julio, el número de parados registrados en Castilla y León en agosto también aumentó; en esta ocasión un 1% respecto a julio (973 personas). En relación al pasado año, descendió un 4,2%, y la cifra de desempleados en la Comunidad se sitúa en 103.166 desempleados. Cabe recordar que en el mes de agosto del pasado año 2023 el incremento fue de 968 personas (0,91%).
Por su parte, el número de afiliados a la Seguridad Social en agosto fue de 986.415 personas, 4.013 menos que en julio, lo que supuso un descenso del 0,41%.
Ante estas cifras, la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León insiste en la importancia de avanzar en mecanismos que faciliten el ajuste entre la oferta y la demanda de empleo, de manera que se pueda atender las necesidades presentes y futuras de las personas trabajadoras y de las empresas.
Igualmente, reclama estabilidad y, especialmente, poner fin a los continuos anuncios de cambios normativos por parte del Ministerio de Trabajo y Economía Social, pues las empresas necesitan confianza y seguridad jurídica para reforzar o emprender nuevos proyectos empresariales, así como mejorar su competitividad como elementos que siempre han garantizado la sostenibilidad y la creación de empleo.